Empleo Senior
 
 ¿Ciencia ficción?
Ante la Gran Crisis Mundial, se han reunido los Ministros de Economía, de varios Países.
El objetivo de esa reunión fue, como es lógico, para encontrar soluciones. Y han tratado el déficit que todos los Gobiernos sufren y sufrirán.
Habla el Ministro de Tontolandia: Señores, la partida presupuestaria MAS importante es la que el pueblo llama “beneficios sociales” y debemos empezar por ahí a recortar el déficit. Cada vez piden mas, y son mas personas, que nos cuestan mucho dinero.

Todos asienten, y toma la palabra el Ministro de Estupidilandia: en mi País, y supongo que en todos, un grave problema es el montante de las pensiones de jubilación, ya que es un sistema “piramidal” y con el paro que hemos generado, y los sueldos bajos de los nuevos trabajadores, será imposible poder pagarlas en el futuro.

Se producen opiniones cruzadas, simultáneas, pero coincidentes en el análisis.

El moderador, Ministro de Gilipichistán, pide silencio, calma y abre un turno de palabra.

El Ministro de la IRB (Importante República de Bobolia) dice: Nosotros proponemos lo siguiente: Dado el alto nivel de nuestra medicina, la edad a la que mueren nuestros súbditos (perdón, ciudadanos) es cada vez más alta. Por ello, deberíamos lograr que mueran antes, por ejemplo bajando el nivel de nuestros cuidados médicos.

Se oyen quejas airadas, palabras gruesas, hasta insultos y otra vez el moderador pide calma y respeto al turno de palabra.

“Tiene la palabra el Ministro del Reino de Subnormalia”

Sube al estrado y dice.

Estimados colegas. La solución es muy sencilla. (Estupor, asombro en la sala). Si para tener derecho a una pensión de jubilación se debe haber cotizado, digamos, 25 años, lo más sencillo es que un gran número de trabajadores dejen de serlo en sus últimos 25 años laborales.

El silencio en la sala se puede cortar con un cuchillo, gestos de “no lo entiendo” “de que va eso”, etc, hasta que se oye una voz que pregunta:

¿Y como se hace eso, nos lo explica?


Con una sonrisa de superioridad, el Ministro diserta:

Piensen los señores Ministros. Un trabajador, a partir de, digamos, los 40 o 45 años, tiene experiencia, habrá progresado y logrado puestos de responsabilidad, hasta de alta dirección. PUEDE LLEGAR A TENER UN ALTO SUELDO y, eso, supone cotizar más para tener una mayor pensión. ¿Me siguen?

Un “SI” alto y unánime es la respuesta inmediata.

Bien, prosigue el ponente, entonces, lo que hay que hacer es que a esa edad, los 40, o 45, (“o incluso antes, se oye en la sala”), esperen, dice el ponente extendiendo los brazos, evitemos que las personas encuentren trabajo, dejen de cotizar y, por tanto, dejarán de tener derecho a pensión. Pero lo que han abonado hasta ese momento, no se les devuelve, va a la “caja” para pagar parte del déficit.

La sala estalla en una ovación, los asistentes puestos en pie gritan “Bravo”, “Genial”, y aplauden como locos.

El moderador, Ministro de Gilipichistán,  vuelve a pedir silencio y dice:

Vista la aceptación de la muy buena idea, creo que debemos crear un grupo, al mando del autor de dicha idea, para diseñar la implantación en cada uno de los países, ya que estarán de acuerdo conmigo, que se debe hacer de forma universal y coordinada.

Si se preguntan porque, les diré que si se hiciera en pocos países, sus políticos serían (seríamos) tachados de “genocidas laborales” de los trabajadores de ese rango de edad (sonrisas de complicidad en la sala). Mientras que si “globalizamos” (carcajada de todos) la “medida” solo se podrá acusar de su efecto a la “crisis”, a los empresarios y … (una voz grita “y a las religiones”) bueno, dice el moderador, ¿porque no? Y a algunas religiones, pero NUNCA (enfatiza) a nosotros los Políticos. (Aplausos)

La reunión siguió, pero ya no hay nada de interés que reseñar. Y, como dijo el moderador el Muy Ilustre y Muy Venerado Ministro de Gilipichistán, un genocidio laboral se ha transformado en una simple secuela de la crisis globalizada, resultado de malos empresarios y algunos lideres religiosos que malmeten al súbdito (perdón, pueblo o ciudadanos) y. (se me ocurre a mi) a la “Prima” esa de los Mercados.

En resumen, los mayores de 45 años están condenados a renunciar no solo a trabajar a esa edad, sino a su derecho derivado de contar con una pensión de jubilación.

En este punto, se me ocurre una idea que debo hablar con un amigo,  que es un alto ejecutivo del área de seguros, y se trata de proponerle un negocio que es el de ofrecer planes de jubilación privados a esos miles, millones de mayores de 45 años que nunca mas tendrán el “beneficio social” de una pensión de jubilación.

Cuanto mas lo pienso, mas parece un buen negocio, con que me den un 1% de las primas que consiga colocar, a ver 3 x 7 = 21 y me llevo 2 y otros 2 y otros 2….

Si, no es mal negocio, muy interesante

¿O no?

Max Torrado (en el futuro Max Forrado)